La conciliación teológica y filosófica para una vida virtuosa
Maximiliano Israel Bustamante Pereira ∙ 12 minutos de lectura
En este ensayo me enfoco en responder la siguiente pregunta, ¿La ética de virtud es viable hoy en día? Mi postura es que la ética de virtud si es viable hoy en día ya que las acciones humanas siguen siendo actos que están ligados al razonamiento y las emociones. Esta respuesta es desarrollada a partir de mi interpretación de la filosofía y teología de Tomás de Aquino con respecto a la doctrina moral.
Mi plan para este trabajo es el siguiente. En la primera parte de mi ensayo voy a introducir las dos principales áreas generales de la ética, esto debido a que es importante plasmar los antecedentes y conceptos clave para comprender la ética de virtud de Aquino. En la segunda voy a explicar la doctrina moral de Tomás de Aquino. En la tercera parte voy a dar una formulación del argumento sobre la viabilidad de la ética de la virtud, explicarlo y desarrollar un ejemplo. En la cuarta, ofreceré dos contraargumentos y explicarlos. Por último, discutiré las debilidades de estos contraargumentos.
Introducción al campo de la ética
Todo ser humano toma decisiones que influyen en el rumbo de su vida, ya sea de manera individual o colectiva las cuales pueden ser correctas e incorrectas dependiendo de las consecuencias; nuestras decisiones pueden cambiar por diversos factores como la educación, religión o ámbito social, por lo que la ética de cada individuo puede presentar similitudes y diferencias. El área encargada de estudiar esto se conoce como el campo de la ética.
El campo de la ética (o filosofía moral) consiste en sistematizar, defender y recomendar conceptos de comportamiento correcto e incorrecto. Los filósofos actuales suelen dividir las teorías éticas en tres áreas temáticas generales: 1) metaética, 2) ética normativa y 3) ética aplicada. [1]
La doctrina moral que presenta Tomás de Aquino está enfocada principalmente en el área de la ética normativa ya que se basa en el desarrollo de virtudes para realizar acciones correctas. “Un bien deseado proporciona el motivo para iniciar y completar algún acto”. (McInerny, Ralph & O'Callaghan 2021, 4) Sin embargo, es importante comprender las dos primeras áreas generales de la ética ya que cada subcampo aporta el conocimiento suficiente para distinguir lo que conocemos como bueno, la adquisición y práctica de valores en la toma de decisiones en nuestro día a día.
1) Metaética
La metaética investiga el origen de nuestros principios éticos y qué significan. “Hay dos direcciones generales que toman las discusiones sobre este tema, una de «otro mundo» y otra de «este mundo»”. (Fieser 2023, 2) Se habla de «otro mundo» porque se considera que los valores morales son absolutos e inmutables, es decir, los valores de la actualidad son los mismos que han estado presentes en la antigüedad y lo seguirán estando dentro de otros dos mil años, de la misma manera podemos relacionarlos con mandatos divinos que Dios ha impregnado en cada uno de los seres humanos.
Por otro lado, cuando se trata de «este mundo», se hace referencia a que la ética es creación humana por lo que es relativa, lo contrario a la postura anterior, los valores de hoy no son los mismos que en la antigüedad y serán diferentes a los del futuro.
2) Ética Normativa
“La ética normativa implica llegar a normas morales que regulen la conducta correcta e incorrecta”. (Fieser 2023, 2) En otras palabras, nuestras acciones ya son reguladas por las leyes que determinaran si lo que hacemos es bueno o malo, no hay términos medios, es blanco o es negro, pero jamás será gris porque cada decisión será juzgada por el principio determinado. Existen cuatro teorías de la ética normativa, no obstante, solo nos enfocaremos en la primera porque es la teoría principal en la que se basa Tomás de Aquino para desarrollar su filosofía sobre la doctrina moral.
I. Teorías de Virtud
Busca desarrollar buenos hábitos, los cuales influirán en nuestras acciones, es decir, para poder actuar con amor primeramente debo obtener la virtud del amor. “Según Aristóteles, no es fácil encontrar el medio perfecto entre los rasgos extremos del carácter”. (Fieser 2023, 6) Con esa premisa en mente, algunos teólogos como Tomás de Aquino consideraban que existen virtudes que no podemos alcanzar sin intervención divina.
Doctrina moral de Tomás de Aquino
La doctrina moral se basa en la Teoría de Virtud, la cual consiste en desarrollar buenos hábitos, sin embargo, debemos distinguir en la filosofía de Tomás que consideraba que la meta de estas virtudes era la felicidad. “Hay un único bien humano último que proporciona una ordenación de todos los demás bienes humanos como parciales en relación con él, a saber, la felicidad o mejor en el latín beatitud”. (McInerny, Ralph & O'Callaghan 2021, 4)
Partiendo de la premisa de que la felicidad es el fin de las virtudes, “Tomás distingue en la Suma Teológica entre la felicidad imperfecta de esta vida y la felicidad perfecta de la otra vida en la beatitud o unión con Dios”. (McInerny, Ralph & O'Callaghan 2021, 5) De esta manera podemos percatarnos que mediante nuestra capacidad humana sólo es posible alcanzar una felicidad imperfecta, por lo que para poder alcanzar la felicidad perfecta a la que se refería el filósofo es mediante una comunión con Dios.
Tomás de Aquino hace distinción de dos tipos de virtudes: virtudes naturales y virtudes teológicas. Es importante señalar que ambas virtudes no deben considerarse como ajenas o distintas en la vida humana, son complementarias.
- Virtudes naturales
“Las virtudes naturales son las que pertenecen a la felicidad de esta vida que es «proporcionada» a la naturaleza humana”. (McInerny, Ralph & O'Callaghan 2021, 8) Estas virtudes se subdividen en morales e intelectuales. Las virtudes morales están relacionadas con la voluntad y el comportamiento; se enfocan en el actuar bien ya que regulan nuestras pasiones, por ejemplo, la templanza y la fortaleza. Por otro lado, las virtudes intelectuales están orientadas al desarrollo del conocimiento y perfeccionan el razonamiento humano, el ejemplo más claro es la virtud de la prudencia.
- Virtudes teológicas
“Las virtudes teológicas pertenecen a la beatitud que no es proporcionada a la naturaleza humana, el bien sobrenatural de la vida con Dios”. (McInerny, Ralph & O'Callaghan 2021, 8) Estas virtudes no pueden ser alcanzadas por el esfuerzo humano, sino que son otorgadas por gracia por parte de Dios, las cuales se impregnan en el alma orientadas hacia la comunión con Dios, son tres: fe, esperanza y amor. De acuerdo con Tomás de Aquino, las virtudes teológicas al ser infusas por gracia divina pueden ser fortalecidas.
Argumento sobre la viabilidad de la ética de la virtud en la actualidad
1. Si las virtudes son hábitos desarrollados que disponen a las personas a hacer buenas acciones entonces la ética de la virtud es viable hoy en día.
2. Las virtudes son hábitos desarrollados que disponen a las personas a hacer buenas acciones.
C. La ética de la virtud es viable hoy en día.
Una sociedad que basa su ética en desarrollar hábitos, por consiguiente, realizará acciones beneficiosas, por lo tanto, la ética de la virtud viene siendo viable hoy en día. Ya que entre más personas desarrollen virtudes, más acciones buenas surgirán en la sociedad. Una manera de aplicación sería el desarrollar la virtud de la templanza, ya que modera los deseos y las pasiones, y ayuda a mantener el equilibro y la calma. Si las personas practicaran este hábito, los conflictos, la ira descontrolada e incluso el abuso de sustancias, disminuirían en la sociedad, reduciendo así actos de violencia, robos, entre otros crímenes que estén relacionados con la falta de esta virtud.
Contraargumentos
El primer contraargumento le llamaremos Argumento del Relativismo Moral.
1. Si la ética de la virtud es viable hoy en día entonces todas las personas desarrollan exactamente las mismas virtudes para hacer buenas acciones.
2. No todas las personas desarrollamos exactamente las mismas virtudes para hacer buenas acciones.
C. La ética de la virtud no es viable hoy en día.
Existen factores como la educación, religión o ámbito social que provocan que la ética sea diferente ya sea de manera individual o colectiva, por lo tanto, la viabilidad de una ética de virtud recae en que como seres humanos desarrollemos las mismas virtudes, de lo contrario no alcanzaríamos a realizar las mismas buenas acciones y caeríamos en el relativismo moral.
El segundo contraargumento le llamaremos Argumento Teológico Racional.
1. Si la ética de la virtud es viable hoy en día entonces todos los seres humanos mantenemos una unión con Dios y nuestras acciones siempre están sometidas bajo el imperio de la razón y voluntad humana.
2. No todos los seres humanos mantenemos una unión con Dios y nuestras acciones no siempre están sometidas bajo el imperio de la razón y voluntad humana.
3. La ética de la virtud no es viable hoy en día.
De acuerdo con Tomás de Aquino, las virtudes humanas están sometidas al imperio de la razón y la voluntad, sin embargo, no siempre sucede eso, según David Hume el razonamiento presupone los deseos y pasiones del ser humano, por lo que hay ocasiones en las que el deseo de cometer un acto inmoral puede pesar más que la propia voluntad humana. (William Edward Morris y Charlotte R. Brown 2019, 7) De la misma manera no todos los seres humanos mantienen una comunión con Dios, existen personas ateas, diferentes religiones y miles de personas creyentes pero que no mantienen una unión con Dios.
Debilidades de los contraargumentos
Debilidades del Argumento del Relativismo Moral.
Existen virtudes que son consideradas como cardinales debido a que son fundamentales en las relaciones humanas y además de las cuales se desprenden otras virtudes, por lo que cada ser humano es capaz de desarrollar las virtudes cardinales ya que están ligadas al raciocinio y deseo humano para hacer buenas acciones. Cabe mencionar que las virtudes cardinales pueden ser adquiridas por el esfuerzo humano, ser perfeccionadas mediante la práctica y alineadas por medio de una ética normativa, evitando caer en el relativismo moral.
Debilidades del Argumento Teológico Racional.
Según Tomás nuestras decisiones también están bajo un apetito racional adherido al intelecto las cuales son enfocadas al desarrollo humano, de esta manera, mientras más conocimiento adquiramos nuestras acciones estarán bajo un mejor control intelectual y racional. Por otro lado, la fe muchas veces es la respuesta que usamos para darle respuesta a las cosas que no logramos comprender, como la existencia de Dios.
Una cosa es creer en Dios y otra es creerle, por lo que para creerle es necesario desarrollar las virtudes teológicas las cuales no pueden ser alcanzadas por esfuerzo humano. “Las virtudes teológicas son la fe, la esperanza y el amor. Tienen que ver con la beatitud eterna y son simplemente infundidas por el don de la gracia de Dios”. (McInerny, Ralph & O'Callaghan 2021, 8) Tomás de Aquino sostiene que las virtudes teológicas son infundidas por la gracia de Dios, y no necesariamente deben tener una comunión con Dios para recibir estas virtudes, de lo contrario ya no sería gracia. La gracia divina eleva la virtud, pero no la anula en los no creyentes.
Conclusión
Como hemos visto, partiendo de la doctrina moral de Tomás de Aquino las virtudes son los hábitos desarrollados encaminados a un bien en específico los cuales son regidos por el uso del razonamiento y el deseo humano. Por lo que vivir una ética con base a la virtud permitirá realizar buenas acciones y al mismo tiempo desarrollar un crecimiento encaminado a la satisfacción perfecta, la beatitud.
Para poder presentar estas conclusiones, lo primero que hice fue realizar una introducción al campo de la ética para poder identificar el subcampo al cual nos enfocaríamos y de esa manera comprender el origen de la doctrina moral de Tomás. Debemos tener claro que la misión principal de la ética es guiar el comportamiento humano hacia el bien, distinguir acciones moralmente correctas e incorrectas, comprender que nuestras decisiones tienen consecuencias y que nos afectan de manera personal y social, todo esto es fundamental para poder construir una sociedad más justa y equitativa. Así pues, podemos concluir que vivir una ética de virtud es viable en la actualidad.
Bibliografía
Fieser, J., 2023. “Ethics”. Internet Encyclopedia of Philosophy. https://iep.utm.edu/ethics/
McInerny, Ralph & O'Callaghan. 2021. “Saint Thomas Aquinas”. Stanford Encyclopedia of Philosophy. https://plato.stanford.edu/archives/sum2018/entries/aquinas/
Orduña G., 2024. “La religión como brújula moral y responsable de todos nuestros actos”. Ensayo de Mindshop. https://mindshop.cafe/la-religion-como-brujula-moral-y-responsable-de-todos-nuestros-actos/
Lanier Anderson. 2021. “Friedrich Nietzsche”. Stanford Encyclopedia of Philosophy. https://plato.stanford.edu/entries/nietzsche/
William Edward Morris y Charlotte R. Brown. 2019. “David Hume”. Stanford Encyclopedia of Philosophy. https://plato.stanford.edu/entries/hume/
Notas
[1] Fieser, J., 2023. “Ethics”. Internet Encyclopedia of Philosophy. https://iep.utm.edu/ethics/
